


Busco a mi padre a lo largo de un viaje que me hace volver desde Chile a la ciudad de mi infancia en Venezuela. Su muerte inesperada ha dejado solitaria una casa que guarda las huellas de nuestra familia exiliada desde 1973.
Mientras construyo una “película jardín” con elementos de ambos países intento reconciliarme con la memoria de mis padres y encontrar una nueva comprensión de nuestra historia.

Sinopsis
Filmo a mi padre anciano, un chileno exiliado que lleva 46 años viviendo en Venezuela, durante sus visitas a mi departamento en Santiago de Chile. Soy su única hija, y entre su silencio de toda una vida y mi culpa por no poder remediar nuestra mala relación coloco una cámara, buscando acercarme..
La pandemia lo obliga a quedarse en Chile, donde su hermano lo acoge en su casa que tiene un jardín inmenso. Allí, mi lente captura los primeros destellos de un vínculo amoroso que parecía imposible. Pero un infarto lo sorprende, y su muerte repentina desata en mí un duelo que se convierte en misión: entenderlo, perdonar su distancia emocional y despedirlo.
Viajo a Venezuela, al país donde crecí, para enfrentarme a una casa invadida por la maleza, cargada de fragmentos de las vidas de mis padres. Mientras limpio y vacío ese espacio junto al jardinero que lo acompañó en sus últimos años, proceso también el duelo inconcluso por mi madre, quien murió en esa casa, lejos de mí. Sus diarios, collares y ropa me permiten reencontrarme con su dulzura, mientras descubro facetas desconocidas de mis padres a través de los testimonios de mi familia consanguínea, postiza y espiritual.
En ese proceso, reconstruyo la historia de mi pequeña familia marcada por la soledad, la distancia y el desarraigo. La casa se transforma en un escenario, donde filmo pequeños actos teatrales en los que ocupo el lugar de mis padres y trato de llenar los vacíos de nuestra historia familiar. La cámara que manejo, imperfecta y frágil, refleja mi propio estado anímico mientras construyo un “jardín cinematográfico” que une los verdes de Chile y Venezuela.
Al final, este jardín emerge como un lugar de reconciliación, donde despido a mis padres y transformo el duelo en una despedida luminosa, dejando que la memoria y la vida florezcan juntas.
El Equipo

Post producción imagen
Daniel Dávila
Desde 1997 hasta la actualidad ha hecho carrera como animador y postproductor, trabajando en México en el Centro de Capacitación Cinematográfica y fundando Kiné Imágenes en Chile, la cual ha prestado servicios de post producción a premiadas películas latinoamericanas de ficción y documental.
Tiene en su haber más de 50 películas de ficción, entre ellas “De jueves a Domingo” de Dominga Sotomayor, “La Familia” de Gustavo Rondón, “Y de pronto el amanecer” de Silvio Caiozzi, más de 23 largometrajes documentales entre ellos “El hombre nuevo” de Aldo Garay, 74mtos cuadrados de Paola Catillo y Tiziana Panizza y varios cortometrajes.
Actualmente tiene su compañía DA cine imagen diseño. Trabajó con Ximena Pereira en sus dos últimos cortometrajes, Espacio Moneda y La Diosa Quebrada.

Dirección / Producción
Ximena Pereira
Cineasta y docente chilena-venezolana con trayectoria en Cortometrajes de ficción, documental y Documentales para TV
Egresada del Centro de Capacitación Cinematográfica de México en la especialidad de guión y de la Escuela de Comunicación Social de la Universidad Central de Venezuela.
Sus trabajos han participado en festivales de prestigio como Sundance, Montreal Films du Monde, Hot Docs, Málaga, Valdivia, Ciné Latino de Toulouse, San Diego Latino.
Actualmente distribuye su cortometraje documental “La Diosa Quebrada”, coproducción Chile-Venezuela que ha ganado varios premios, mejor obra y mejor producción en Festival Paracinefagos, mejor montaje en Festival de Cine Venezolano y premio SIGNIS en FIDBA. Argentina 2024. Mejor film multicultural en 30 th SPE Media Festival, Reno. US.

Director de fotografía
Camilo Paparoni
Licenciado en Medios Audiovisuales con mención en Fotografía de la U.L.A. Su pasión por la fotografía y el cine social en Venezuela se gestó desde temprana edad bajo la influencia de su padre, fotógrafo. En 2016, recibió el premio Mejor Cámara por "Respira".
Destacan trabajos como "Salta", mención especial en el festival de Tribeca en Nueva York 2017, y "Voy por ti", selección oficial del Miami Film Festival 2019. Actualmente realiza la dirección de fotografía del largometraje documental "Casas Muertas" dirigido por la reconocida documentalista venezolana Rosana Matecki.

Sonidista
Lino Ocando
Licenciado en Medios audiovisuales mención Sonido de la U.L.A. Tiene una vasta carrera como sonidista en campo y en postproducción.
Ha trabajado en más de 12 largometrajes, 30 cortometrajes y 20 documentales en Venezuela, Estados Unidos y Panamá.
Fue sonidista de “Yo imposible” de la destacada cineasta venezolana Patricia Ortega y de “Historias Pequeñas “de Rafael Marziano, con la que ganó Mejor sonido en el Festival de Cine Venezolano de Mérida. Ha ganado varios premios de mejor sonido y música en festivales.

Post producción Sonido
Marcos Salazar
Ingeniero en Sonido y Magister en Cine Documental en la Universidad de Chile. Realiza postproducción de sonido de películas de ficción y documentales en su estudio SUE sonido inmersivo donde ha trabajado en más de 50 obras audiovisuales como mezclador y diseñador de sonido.
Ha trabajado con reconocidos documentalistas chilenos como Ignacio Agüero, y con Valeria Sarmiento, en una obra póstuma de Raúl Ruiz. Trabajó con Ximena Pereira en sus dos últimos cortometrajes, Espacio Moneda y La Diosa Quebrada.
La muerte de mi padre me hizo consciente de lo importante que él fue en mi vida, a pesar de haber vivido la mayor parte de nuestras vidas en ciudades distintas y de no haber tenido nunca una relación fácil.
Viajar hacia mi infancia y hacia Venezuela filmando me permitió reconstruir la imagen de mis padres y por ende de mi misma. Encontré que estaba hecha de sus mismos dolores y les quiero prestar mi voz y mi cuerpo para que a través de mi, liberen asuntos pendientes.
Ese primer y fundamental material grabado es el punto de partida para seguir urgando en las posibilidades que el cine me ofrece como lenguaje y hacer crecer este filme.
Mi rol de “curandera” se entremezcla con el de narradora y cineasta, buscando un lenguaje artístico que refleje un proceso complejo e intenso, colocando en contexto la historia de las migraciones entre Chile y Venezuela a través de mi propia experiencia. Al compartir este proceso cinematográfico y vital, busco resonancia en grupos humanos desplazados de sus lugares de origen y en todos aquellos que conecten con la idea de que las vivencias traumáticas de la familia pueden ser sanadas y que las cargas se pueden ir dejando en el camino.
A veces hay que volver atrás para limpiar el camino hacia adelante.

Ximena Pereira:
Nota de intención de la directora
Compañías
Participaciones


Taller de Desarrollo de
Operas Primas FEMCINE 14
Festival de Cine de Mujeres, Santiago. Chile. 2024

Proyecto Ganador
Fondo Audiovisual 2025. Chile para Desarrollo y Reescritura Documental
